Navegando por la web encontré un post en el blog de Hugo Alconada Mon abogado, periodista, prosecretario de redacción, diario La Nación. El mismo hace referencia al libro “Javier Darío Restrepo, periodismo y pasión”.
La obra detalla: “El periodismo es, para el escritor e intelectual colombiano Javier Darío Restrepo, una verdadera pasión: algo que arde en el alma y en la mente de la persona que sólo encuentra sosiego en la búsqueda de la verdad y en su comunicación”.
El libro compila respuestas a preguntas formuladas por jóvenes profesionales o estudiantes de comunicación social de todo el continente latinoamericano.
Restrepo analiza tanto la responsabilidad o la credibilidad del periodista como el sensacionalismo, la seriedad de las fuentes de información, las presiones de la política y de la publicidad. Pero hay un acento particular puesto en la reflexión sobre la ética profesional, reflexión que surge de su pensamiento y de su rigurosa formación académica, como también de la experiencia personal: lo que convierte a este libro en un testimonio y en un legado de singular valía.
Hugo Alconada Mon comparte en su blog este decálogo que Restrepo elaboró en base a las enseñanzas de otros grandes maestros, como Ryszard Kapuscinski, Camilo José Cela y José Martí, entre otros.
- El buen periodista debe ser, ante todo, una buena persona;
- El buen periodista debe estar orgulloso de su profesión;
- El buen periodista tiene un sentido de misión en su ejercicio profesional;
- El buen periodista es un apasionado por la verdad;
- El buen periodista es autocrítico;
- El buen periodista elabora conocimientos y los comparte;
- El buen periodista hace periodismo con un objetivo;
- El buen periodista tiene el sentido del otro;
- El buen periodista es independiente;
- El buen periodista mantiene intacta su capacidad de asombro.